El Proyecto CIRCOM producirá materiales sostenibles con características cementales a partir de residuos industriales ricos en aluminosilicatos, generados tanto por la industria metal-mecánica como por el sector de construcción.
El aumento de consumo y la consiguiente producción industrial han incrementado el volumen de producción de residuos, a la par que han generado una disminución rápida de los recursos naturales disponibles. Con el fin de mejorar la sostenibilidad de sus procesos productivos, la necesidad tratar, reciclar y valorizar los residuos se ha convertido en un ámbito de trabajo clave para la mayoría de los sectores industriales.
Con la mirada puesta en los sectores metalúrgico y de construcción, como industrias primarias masivas que generan, de manera inherente a sus procesos productivos, una gran cantidad de residuos, acompañada de un elevado consumo energético y de materias primas, el proyecto CIRCOM plantea el abordaje de esta doble problemática a través de la tecnología de activación alcalina (TAA). Específicamente, el proyecto CIRCOM tiene como objetivo la producción de materiales sostenibles con características cementantes fabricados a partir de residuos industriales ricos en aluminosilicatos.
Como aclara Lucía Unamunzaga, responsable de Sostenibilidad y Medio Ambiente en AZTERLAN, “los materiales activados alcalinamente (MAA) son sistemas de aglutinantes generados por reacción de una fuente de metal alcalino (que pueden incluir hidróxidos, silicatos, carbonatos o sulfatos) con un precursor sólido (como aluminosilicatos). Cuando ocurre la reacción, el material fragua y endurece, desarrollándose un compuesto con propiedades cementantes similares (incluso mejoradas) a las de un cemento Portland ordinario”. Por esta razón, “se trata de una vía de investigación de alto interés para la industria de construcción y la fundición de moldeo en arena”.
Además de trabajar en la producción de estos materiales, el consorcio de CIRCOM trabajará también en la “mejora de sus características mediante la optimización del propio proceso de TAA”. Estos materiales, de bajo impacto ambiental, serán empleados en tres aplicaciones vinculadas a los sectores generadores de los propios residuos:
- Elemento prefabricado libre de cemento.
- Moldes de fundición basados en la combinación de un sistema ligante-arena basado en escorias y arenas recuperadas.
- Hormigón refractario, libre de cemento, de elevada resistencia y estabilidad dimensional.
Para lograr sus objetivos, el proyecto CIRCOM cuenta con un consorcio multidisciplinar y de cooperación compuesto por las empresas REINOSA FORGING & CASTINGS, S.L., coordinadora del proyecto, y CANTERA LA TORRETA, S.A., y los Centros Tecnológicos AIMEN, ITC-AICE y AZTERLAN.
El proyecto CIRCOM está financiado con fondos de la convocatoria de Colaboración Público Privada 2021 con una duración prevista de 36 meses, abarcando cuatro anualidades diferentes, entre octubre de 2022 y septiembre de 2025 y con un presupuesto total de 980.930,02€.
Esta actividad es parte del proyecto CIRCOM con referencia CPP2021-008798, financiado por MCIN/AEI/10.13039/501100011033 y por la Unión Europea-NextGenerationEU/PRTR.